La fiesta, en nuestro querido México, siempre ha sido un icono mundial que caracteriza a nuestra nación, pero en lo particular, quisiera platicarles parte de mi historia, que hizo con el tiempo y la experiencia, la formación de esta empresa, y de este fabuloso equipo que hemos llamado Dolce Eventos.
Por los años de 1983, periodo de mi infancia, las reuniones familiares y fiestas comenzaron a marcar un estilo distinto de la diversión común, no tan marcadas las características de la fiesta mexicana, si no, mejor aún, la integración familiar en base juegos y actividades, como lo eran el canto, obras de teatro improvisadas, la poesía, lectura, el baile, juegos de mesa y juegos deportivos, y aunque esto no suene normal para una fiesta, para mí lo era, los adultos por increíble que parezca, participaban en aquellas fiestas multifaceticas, ya que se contagiaban de las risas y del ambiente que se formaba mágicamente, cuando comenzaba el primer expositor, actor, o juego, y no he de mentirles, efectivamente había alcohol, cigarros, comida, pobres, ricos, niños, matrimonios, amigos y todo lo que comúnmente hay en una fiesta familiar por así decirlo; obviamente los vicios estaban prohibidos para nosotros, pero lo increíble era, que pese a nuestra situación económica (no lujos), siempre existía la forma de divertirnos, grandes y chicos, y lo digo en plural, porque al paso de los años, la gente mayor de ese entonces, que ahora es adulta mayor, sigue comentando con gran nostalgia y asombro, el recuerdo de aquellas convivencias sin igual, y de la misma manera los contemporáneos.
Quizá tenga mucho que ver, el que mis padres tenían diversas actividades sociales, a raíz de sus trabajos, y que estas eran siempre en favor de la gente que necesitaba ayuda, supongo que de ahí, su gran habilidad de contagiar un ambiente divertido a chicos y grandes, a ricos y a pobres, en otras palabras, la sencillez de proyectar la fiesta de la vida, y ahí, fue el comienzo del gusto por vivir bien, por divertirse bien, por servir BIEN, filosofías que son ahora, mi mejor herencia.
Y así comenzó todo, después eso se proyectaría en mi desarrollo cultural, y sin darme cuenta, en la juventud ya participaba en competencias atléticas, concursos de canto, organización de juegos múltiples de ajedrez, obras de teatro, concursos de escritura, etc. Reflejo de la infancia, pero siempre hubo algo que predominaba en todas las áreas, y era la música, siempre acompañándome a todos lados donde iba, incluso hasta en la universidad se maximizo más el gusto, porque comencé a escuchar y a conocer los ritmos del mundo, musicalmente hablando, la carrera de Relaciones Internacionales exigía conocer entre tantos datos la música, la gastronomía, la cultura, las costumbres y muchas otras características más, de todos los países del mundo.
Los ingredientes estaban listos ya, pero la oportunidad de abrir un bar en Cuernavaca, toco a la suerte de manera extraña, pues tiempo después, me daría cuenta que la homogeneidad en el ambiente y en la música, es como decir que Don Quijote de la Mancha es la única buena obra literal, y efectivamente se optó por cerrar ese bar y continuar de una forma distinta y multifacética. Aprovechando los conocimientos en computación, la experiencia en ambientes, la gran base de datos de música que habíamos recolectado, y el equipo de audio que tenía, comencé como DJ en fiestas particulares, dado que la gente conocía el ambiente que formábamos en el bar…, el negocio subió, la fama y también los clientes.
Comencé a dar clases para formar DJ s, y efectivamente ahora tienen su popularidad, otros hicieron empresa de este negocio, otros trabajan conmigo aún, pero todavía más extraño, fue que los mismos clientes comenzaron a animarme para que les diéramos un SERVICIO COMPLETO, ya que nuestra disponibilidad, puntualidad, atención, calidad, buen gusto y la forma de trabajar, les convencían sin ningún problema, y que sin duda alguna, seguramente podríamos darles el servicio de todo lo que un evento requiere, con la misma filosofía y con la mejor calidad.
Cuestión que nos hizo formular una pregunta:
¿Qué elementos tiene una fiesta perfecta?
La respuesta era sencilla, todo estaba en mi infancia, en mis recuerdos, en mis padres, en mis clientes, en mi música, todo… siempre había estado ahí, solo había que reunir las características de mis recuerdos, y compartirlo con todas las personas, y realizar una fiesta con los ingredientes mágicos que hacen inolvidable un evento en el tiempo, siendo estas las características que harán de nuestra vida algo valioso, y mantener ese espacio limpio en nuestras mentes por siempre.
Y así comenzó todo, empezamos a reunir a todo nuestro equipo, y debatimos que servicios teníamos que integrar para formar Dolce Eventos México, para hacer de una fiesta un evento dulce en nuestras memorias, y proyectamos, encontramos y nos realizamos.
Así, nuestro gran recorrido por más de 16 años, nos ha conformado con lo mejor de cada evento, se ha reunido a un equipo de trabajo con gran excelencia en todos los aspectos, la confianza y la antigüedad de nuestros amigos y compañeros de trabajo, nos hacen sincronía absoluta cuando laboramos juntos, y siendo así, todos somos uno para usted, la vida misma es una gran fiesta de la cual usted es el Gran Invitado y tenga por seguro, que así será siempre.
Así nació Dolce Eventos México.
Y muy señores nuestros, les doy las gracias por invertir su valioso tiempo con nosotros, esperamos servirle pronto y que su día le sea muy feliz.
Dolce Vita
Atte. Omar Ramírez Mota
Excelencia y Boato
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